Su nombre ya se conocía después de su bachillerato. Tocó en el conjunto Hungária durante casi una década y formó su propio grupo R-GO en 1982, que sigue siendo sumamente popular en la actualidad. Según afi rma, pasó cinco días, desde su nacimiento hasta su bautismo, sin Jesucristo, y desde entonces Dios forma parte diaria de su vida. En una ocasión de aliento, lo expresó así: «Si te encuentras en una situación muy difícil en la vida y oras, te darás cuenta de que la oración es algo muy corto. Es un grito. Como Jesucristo clamó en la cruz. Ya he estado
en una situación muy difícil. Entonces lo único que puedes decir es «¡Ayúdame!». Casi clamamos a Cristo: “Te he confesado toda mi vida, ayúdame ahora. Ahora necesito tu ayuda.” Puede que esto sea muy duro, pero el Padre comprende eso en Cristo.»

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